domingo, 26 de agosto de 2012

Soy Hiperactivo, pero no soy un monstruo....

En más de alguna ocasión hemos escuchado decir: "Este niñito es terrible" "No hay nadie a quien le haga caso" o más triste aún "No, si este niñito ya no tiene remedio"... muchas veces es muy fácil emitir juicio de valor sobre algo o alguien de manera apresurada sin ver más allá de lo que cierta conducta nos está indicando, es indispensable informarse pues en muchas ocasiones podemos estar frente a un trastorno que es más común de lo que se piensa, y que, si bien no se puede pasar de un día para otro o quitarse a los minutos de tomarse una pastilla, con un adecuado tratamiento es posible llegar a encontrar un punto de equilibrio, en este caso nos referimos a la hiperactividad.

La Hiperactividad Infantil es un trastorno de conducta de origen neurológico debido a una baja presencia de Dopamina en las células nerviosas. La Dopamina es una hormona y neurotransmisor, que tiene muchas funciones en el cerebro, incluyendo papeles importantes en el comportamiento y la cognición, la actividad motora, la motivación y la recompensa, el sueño, el humor, la atención y el aprendizaje; en el caso de las personas que presentan hiperactividad esta reducción de dopamina sucede en la corteza prefrontal del cerebro. Cabe destacar que la  Hiperactividad tiene una incidencia de un 3% a un 5% en la población Infantil, presentándose más en niños que en niñas. 

El principal Trastorno de los niños con Hiperactividad es el "Déficit de Atención" y no el "Exceso de actividad motora", siendo la falta de atención la que persiste en la persona, motivo por el cual todo tratamiento se basa en el aprender a vivir con este trastorno.
Las principales funciones neurológicas que se ven alteradas son aquellas que se clasifican dentro de las denominadas funciones ejecutivas, siendo estas:

  • La capacidad para pasar de un modo de pensar o de una estrategia a otra (flexibilidad).
  • La organización o capacidad para anticiparse tanto a los problemas como a las necesidades.
  • La planificación o establecimiento de objetivos.
  • La memoria a corto plazo, para recibir, guarda y recuperar información al realizar un trabajo.
  • La separación de las emociones afectivas de los procesos cognitivos.
  • La inhibición y regulación de las acciones verbales y motoras, osea, el llegar a conclusiones demasiado rápidamente y la dificultad para mantener una formación de manera apropiada
(Cabe destacar que este trastorno en muchas ocasiones es hereditario)


Esta es una pequeña introducción a lo que este trastorno significa, la información que podemos encontrar es bastante amplia y debo decir, que cada día se realizan cantidades de estudios para poder encontrar algún tipo de "cura" o un nuevo medicamento que ayude a potenciar las áreas deficitarias. Existe una serie de características que si bien no se presentan todas en una persona, pueden darnos luz y apoyo para identificar y discriminar si nos encontramos frente a un caso de hiperactividad. les sugiero el siguiente enlace claro y simple: http://www.psicopedagogia.com/articulos/?articulo=185
Y bueno, su tratamiento? Debe ser una terapia conductual y farmacológica . En el primer caso es recomendable involucrar a la familia y al colegio con el fin de que puedan comprender las actitudes y conductas del menor, y bueno, yo en lo personal, creo que es aconsejable explicarle al menor, puesto que en muchas ocasiones los niños sienten que son culpables de algo terrible, terminan con un auto convencimiento de que "son malos" lo que puede generar algún tipo de depresión infantil y/o desvalorización de si mismo.  En cuanto al tratamiento farmacológico es posible encontrar tres principales fármacos (o los más conocidos): METALFENIDATO, que produce una disminución en la sensación de fatiga, aumento de alerta mental, euforia moderada y sensación de júbilo; ATOMOXETINA, que incrementa las concentraciones de dopamina y norepinefrina en la corteza prefrontal; MODAFINILO, el cual actúa como estimulante del sistema nervioso, aunque no es utilizado con mucha frecuencia.

¿Demasiada información? y no se acaba!!! pero tengo el convencimiento de que mientras más sabemos a cerca de un trastorno, mejor podemos informar y apoyar a quienes acuden a nosotros, pues no debemos olvidar que un padre o una madre, no solo lleva a su hijo buscando técnicas de estudio o de manejo de conducta, sino también una palabra que les pueda ayudar a ver, por decirlo de un modo coloquial, "la luz al final de túnel". 

viernes, 24 de agosto de 2012

Psicopedagogo o Educador Diferencial

Es muy común encontrarnos con esta "disputa", por así decirlo, en más de alguna ocasión. Que uno es mejor que el otro, que uno sirve que el otro no, que uno encuentra trabajo mas rápido que el otro, y así, etc, etc, etc. La cuestión es que ninguno de los dos es mejor que el otro, ya que si bien en algún momento sus trabajos se cruzan, cada cual posee sus diferencias tanto a nivel profesional como el campo laboral que éstos pueden llegar a alcanzar. 
Me gustaría realizar esta diferenciación para que, quien necesite de uno o de otro pueda poseer la claridad de cuál es el profesional que más se ajusta a las características de las dificultades presentadas por una persona.

Un Psicopedagogo es un profesional que se encarga de estudiar e identificar aquellos procesos que están en la base de las dificultades del aprendizaje y que interfieren con el buen desempeño y rendimiento académico de la persona. Cabe destacar que dichas dificultades pueden también tener su raíz en el ámbito socioemocional de la persona, por lo tanto, el psicopedagogo, debe ser capaz de crear un plan de trabajo "integral" en el cual se pueda involucrar no sólo a quien presenta la dificultad de aprendizaje (ya sea transitoria o permanente), sino que también brindar apoyo y orientación a nivel familiar y al docente que se encuentre a cargo del proceso educativo, esto, a través de estrategias que serán creadas según los requerimientos de cada caso.  
Cabe destacar que debido a que el psicopedagogo se encarga de los procesos que intervienen en el proceso de anseñanza aprendizaje, éste puede realizar intervenciones en menores desde los 0 años (a través de guías de apego y estimulación temprana) hasta la adultéz mayor (buscando la estimulación de los procesos de memoria y atención, entre otros). Es así que el psicopedagogo puede abarcar un campo ocupacional bastante amplio y no dirigirse única y exclusivamente a los colegios. Cabe destacar que hasta hace unos años el psicopedagogo requería de un post título en Ed. Diferencial para trabajar en colegios, pero hoy en día gracias a la promulgación del Decreto 170, se reconoce la labor del psicopedagogo para la evaluación de alumnos con el fin deidentificar a aquellos que posean necesidades Educativas Especiales, con el fin de que el colegio cuente con una Subvención Escolar Preferencial (SEP) que les brinde apoyo económico para poder tratar el déficit que puedan presentar.

Un Educador Diferencial, como su nombre lo indica, es un "Docente" capaz de innovar, orientar y apoyar procesos educativos inclusivos, especialmente destinados a los alumnos que presentan necesidades educativas especiales como, Déficit intelectual, Síndrome de Down, Síndrome Asperger, Trastornos del Lenguaje, entre otros. Ahora, debido a su formación docente, su trabajo se limita a colegios, a menos que posean una especialización en trastornos del aprendizaje o un post título en psicopedagogía.

Así es que, cuál es el especialista de usted requiere: Educador Diferencial o Psicopedagogo? juzgue usted.

sábado, 17 de marzo de 2012

La Psicopedagogía, es denominada una ciencia que se encarga de estudiar el comportamiento humano en situaciones psicoeducativas. En Chile, data desde el año 1981, realizando aportes no solo en el área educacional, sino también en el área social y clínica.
Un psicopedagogo(a) se encarga de conocer y comprender los procesos que intervienen en el aprendizaje de las personas, con el fin de establecer un plan de trabajo que pueda ayudar a quienes presenten dificultades tanto a nivel de comprensión como del cálculo, además de utilizar estrategias que ayuden a estimular y potenciar el nivel de motivación de las personas frente al proceso de enseñanza aprendizaje. Esta intervención puede realizarse de manera individual o grupal y debe ser continua, dinámica y considerar las diferentes variables que influyan en la persona a quien va dirigida (contexto en que se desarrolla, familia, características psicológicas, etc.), además de contar con una planificación que incluya un proceso de evaluación, con el fin de poder identificar si una estrategia trazada, debe ser cambiada por otra.
Cabe destacar que el trabajo del psicopedagogo(a), involucra no sólo la intervención psicoeducativa con niños, sino que también con adolescentes, adultos y adultos mayores.